domingo, 29 de agosto de 2010

La vida fuera del monasterio

Llevar una vida dichosa y llena de paz a través del Zen es posible, esta posibilidad se encuentra al alcance de todas las personas, Tu y todas las personas que te rodean pueden tener una vida llena de dicha, solo tienes que desearlo y estar listo para renunciar a una serie de cosas, situaciones, pensamientos, rutinas, miedos y hábitos. Podemos pensar que es fácil, las personas que practican día a día sabrán que no lo es, se requiere de un grado alto de disciplina, disciplina que es difícil llevar en el ambiente urbano.

Salimos de casa y no nos encontramos con un hermoso jardín que nos recuerde la impermanencia de las cosas, nos encontramos con espectaculares que nos invitan o nos dicen que debemos de comprar el nuevo atuendo para estar a la moda... Al salir de casa no nos encontramos con un largo camino empedrado rodeado de vegetación por el cual caminaremos hacia nuestro trabajo o escuela, en el cual mientras caminamos nos centraremos en el aquí y en el ahora... en realidad nos encontramos con el inerte asfalto, un carro que lleva por voz noticias que generalmente nos dicen que todo esta en problemas, caos, trafico, se nos hace tarde y solo pensamos en que hace 5 minutos deberíamos estar en la oficina o en una junta importante.

Así a lo largo del día, el ambiente urbano, la televisión, las cuentas por pagar, el smog, las peleas familiares,  las riñas con los amigos... tal vez nos dificulten practicar nuestro Zen, tal vez nos dificulten llevar una vida dichosa... o tal vez no, puesto que todo ES; El estrés, el enojo, el vacío, las peleas y dificultades se encuentran dentro de nosotros y como artistas las plasmamos con todos nuestros sentidos en el ambiente que nos rodea...

Aquí encontraremos consejos, guías, apoyo, enseñanzas y reflexiones sobre como llevar una vida Zen y no sufrir en el intento.